Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de diciembre, 2015

La pelea

         Bueno, ya conocéis a Lorenzo. También sé que todos tenéis para contar alguna anécdota o sucedido, más o menos ocurrente, de él. ¡Es un hombre tan peculiar!..., aunque sólo sea por su imagen, con ese parche negro tapándole la cuenca vacía de su ojo derecho. Sin embargo, lo que hoy os voy a relatar supera a todo lo narrado hasta ahora sobre él.             Lorenzo y Marta hace unos meses, huyendo del bullicioso centro sevillano, se fueron a vivir al extrarradio. Habían llegado a la edad en la que se busca más la tranquilidad y la calma que el ajetreo y alboroto propio de los años mozos. Alquilaron un pisito en la primera planta de un edificio recién construido. Dormitorio, saloncito, cocina y un escueto cuarto de aseo. Eso sí, todas las habitaciones, salvo el cuarto de aseo, con ventanas a la calle y orientadas al noreste, que es más fresco y en Sevilla eso se agradece. Hasta pusieron un par de macetas con geranios en las ventanas. –Marta, mira que paz y sosiego